
En “Los Serrano” cada uno aportaba hijos de su anterior relación. ¿Será todo tan idílico como en la serie?
En nuestra colaboración habitual en el programa de Javi Nieves, La Mañana de la COPE, tratamos ayer el tema de las parejas reconstituídas: aquellas en las que uno o los dos miembros de la nueva pareja tienen hijos de una relación anterior. En estas situaciones, cada vez más habituales en nuestro entorno surgen una serie de cuestiones importantes:
¿Afectará esta convivencia a la relación de pareja? ¿En qué medida les influye la nueva situación a los hijos? ¿Cómo abordar los problemas de convivencia que surjan con los hijos de tu pareja, siendo consciente que no son tus hijos? ¿Cómo debo tratarles, como un amigo, un padre o simplemente educado? ¿Es de mi incumbencia educarles? ¿Dónde está el límite?
Podéis escuchar el audio de la entrevista un poco más abajo pero os dejamos algunas de las claves que consideramos necesarias para abordar de la mejor manera posible esta situación:
-Primero reconocer y aceptar que no va a ser fácil. No hay que tratar de forzar los vínculos o los nuevos afectos, sino dejar que surjan de manera natural.
-El nuevo “progenitor” no debe pretender ocupar el lugar del padre biológico. Para un niño, el nuevo adulto es un extraño y un intruso y esto no tiene nada que ver con la bondad o la personalidad del adulto. Los niños necesitan conservar un sitio para sus padres naturales y abrir un espacio adicional para el nuevo adulto que entra en sus vidas. Esto requiere TIEMPO y PACIENCIA.
-Resolver los conflictos de manera realista, congruente y AMOROSA (son niños y más todavía si son adolescentes), y estimular el diálogo constante entre hijos y adultos.
-TODOS los adultos que están implicados deben evitar enviar mensajes contradictorios a los hijos. Tienen que ponerse de acuerdo.
-Es muy importante el papel que el progenitor de los hijos da a su pareja delante de estos. ¿Le otorga parte de su autoridad o por el contrario le desautoriza constantemente?
-El progenitor que no tiene los hijos siempre puede actuar como un adulto para mantener las normas comunes de la convivencia aunque no actúe como “padre” o “madre”.
–No sirve inhibirse, sin haberlo pactado, y relegar toda la parte educativa en el padre o madre biológico, si este pide ayuda: “son tus hijos y te encargas tú”…
–No hacer diferencias entre los hijos de cada uno que conviven en la misma casa. Las normas han de ser iguales para todos. Esto es muy importante si además la pareja decide tener otro hijo en común.
Esperamos que estos consejos os sirvan de utilidad si estáis en una situación como la que describimos. Podéis tener más información sobre este tema en nuestro manual: “Ysinembargotequiero: claves para una buena vida en pareja”, en la que una de las parejas principales que describimos está en una circunstancia similar.
A continuación el audio de la entrevista. ¡Hasta pronto!